23 octubre, 2006

Nuestro comportamiento. A veces, un misterio

- Buenos días, sr López, qué contento que le veo hoy. ¿qué, le ha tocado la lotería?¿le han subido el sueldo?¿ Por fin se ha ido su suegra de casa?
- No, es que ayer vi a Alonso, ¡¡¡Campeón de nuevo!!!

Hoy toda España volvía a estar contenta. Alonso vuelve a ser campeón. Ayer fue una tarde de televisión obligada, de nervios y de reunión en los bares.
Lo que me intriga es por qué nos alegramos tanto si ganan y sufrimos tanto si pierden, ¿acaso ganamos algo? Por ejemplo, el día que ganó España el mundial de baloncesto estaba pletórica, que alegría, que ilusión. Y no solo porque ganara España, si no porque era un deporte infravalorado en este país en el que sólo existe el fútbol. Que conste que a mí de pequeña me gustaba el fútbol, de hecho, hasta lo jugaba...pero en el momento en que se convirtió en negocio y dejó de ser deporte...Y ahora hasta me aburre.
En fin, pero a lo que iba. ¿Por qué hechos que nos influyen en el día a día, en nuestra mejora de vida no nos alegra tanto? por ejemplo, estos días está lloviendo a mares. La sequía era inminente y los pantanos estaban de pena pero no llovía ni una gota. Nos hacía falta agua y ahora...pss, ni nos inmutamos, y como mucho nos quejamos.
Hay cosas que no llego a entender de nuestro comportamiento. Y no solo en el deporte. Me he partido de risa cuando he visto a niñas llorando en el día de espulsión de algún triunfito.
¿Será la televisión que es más importante que nuestras propias vidas?¿Será que no nos gusta la vida que llevamos que por un momento intentamos experimentar la vida de otro?¿Será simplemente que no sabemos apreciar lo que tenemos al lado y damos mucha más importancia a lo inalcanzable?